Así mismo, tal y como aseguran escritos tibetanos muy antiguos, la raza atlante se desarrolló “en aquel lugar donde hoy sólo hay mar y cielo” y que obviamente se refriere al océano Atlántico.
La Atlántida con sus dos ciudades principales Toyán y Yafabín era una plataforma de tierra que unía Europa con América. Los atlantes como grandes científicos y magos que fueron, desarrollaron una
tecnología superior que les permitió viajar por el sistema solar y entrar en contacto con habitantes de otros mundos.